Ilustrativa

Cecilia Lasserre es docente jubilada de la Universidad Nacional de Jujuy y en 2008 junto a otras dos mujeres comenzaron a tocar puertas para proponer un proyecto que se trataba de un espacio de contención para mujeres que vivían situaciones de violencia.

Este grupo de mujeres valientes y aguerridas, dos años más tarde de proponer la iniciativa, pudieron hacer realidad el sueño de abrir las puertas de “Un lugar de esperanza”. Este refugio transitorio y gratuito destinado para mujeres víctimas de violencia de género logró establecerse en una vivienda que donaron las Hermanas de la Iglesia del Buen Pastor de Jujuy.

Cecilia comentó que es un paso fundamental el que una mujer llame al refugio para pedir ayuda o asistencia y es por ello que siempre se les trata de brindar un entorno seguro, amigable, pero sobre todo de contención física y psicológica. “Una vez que llegan al refugio, las atendemos y brindamos una asistencia inicial en medio de la situación de trauma, tanto a ellas como a su grupo familiar. De esta manera, las mujeres no deben preocuparse por no contar con un lugar a dónde ir y no tener los insumos básicos para subsistir en caso de querer irse de sus casas. Luego ponemos a su disposición herramientas para continuar trabajando ya desde los organismos legales y de seguridad, y las acompañamos”, detalló Lasserre.

Si bien el refugio inició siendo solamente para mujeres víctimas de violencia, hoy también reciben niños, hombres y personas trans que pasan por situaciones de vulnerabilidad y violencia. El trabajo que se viene desarrollando a pulmón y con colaboración económica de los voluntarios, se visibilizó mucho más en el año 2018 cuando Cecilia fue nominada a los premios Abanderados de la Argentina Solidaria. En la ocasión el proyecto quedó entre los 8 finalistas y a pesar de no haber ganado el premio económico, este grupo solidario quedó con ansias y hambre de generar un impacto solidario mucho más grande.

Hoy, el refugio funciona todos los días del año, las 24 horas del día y con una guardia policial femenina permanente y una voluntaria que cubre el horario nocturno. Las personas que estén pasando por una situación de violencia y no sepan a dónde concurrir pueden comunicarse al 388 – 155964444.

El año de la pandemia: 2020 y violencia

Si bien la pandemia nos obligó a realizar la cuarentena estricta y que todos pongamos la vista en el sistema de salud, la violencia de género no dejo de estar latente. Cecilia comentó al respecto, “durante el 2020 recibimos muchos llamamos, pero lo que más nos llamó la atención es que la gente necesitaba ser escuchada. Las victimas continuaron llegando al refugio y es por ello que decidimos tener todos los recaudos y precauciones posibles para no parar con nuestra labor, pero demás cuidarnos entre todos del virus”.

Nuevas metas

Los voluntarios de “Un lugar de esperanza” hoy trabajan incansablemente para tener su propia guardería para pequeños recién nacidos hasta los 6 años de edad. Lasserre reconoce que éste es un proyecto ambicioso, pero que nada los va a detener para alcanzarlo, “queremos tener un lugar donde las mamás o tutores de los menores puedan dejar a los niños mientras ellas terminan de estudiar, buscan un trabajo, cómo sustentarse económicamente para salir de este entorno de violencia que muchas veces aguantan porque no tienen con qué mantener a sus hijos”.

La labor que realiza este grupo solidario es un acto de amor que muchos necesitan y que ellos están dispuestos a brindar.