El Día de las Almas no es una fecha más, no se simplifica a solo una creencia más. En Jujuy tiene un gran valor cultural que año tras año se reivindica. Es el día en el que los seres que ya no están en la tierra, cruzan para reencontrarse con aquellos que dejaron en vida. Las almas de quienes ya no están son homenajeadas con todo tipo de ofrendas: figuras hechas con masa de pan, salado o dulce, la famosa Chicha de maní o maíz, dulces caseros y otros tantos.
Los altares se arman en las casas, en un rinconcito de lo que alguna vez fue el hogar de quien hoy no está. Las figuras creadas en masa se apilan sobre una mesa que luego se decora con velas, flores, chicha y todo lo que a esa persona le gustaba. Las familias se reúnen a recordar entre risa a los que partieron, convencidos que ellos están ahí, acompañándolos.