Pablo Nogueira es oriundo de Lanús, provincia de Buenos Aires y se mudó a Jujuy hace diez años, gracias a una oferta laboral. Conversamos con él sobre algunas de sus experiencias y la calidad de vida en nuestra provincia.
Claro que es un cambio muy grande, pero necesitar un aire nuevo luego de ver lo mismo durante tanto tiempo es algo completamente entendible. ‘‘De por sí, desde que vivo acá soy una persona mucho más relajada, en todo sentido. Veo hacia el futuro de una manera menos ansiosa, y además, proyecto metas con más armonía’’ afirma Pablo.
Nuestro entrevistado responde a las preguntas con una sonrisa de oreja a oreja, lo que pone en evidencia su felicidad al residir en Jujuy. ‘‘Recuerdo que la primera vez que llegué con mi familia quedé sorprendido. Me enamoré de los paisajes jujeños y la calidad humana que hay’’ asegura. ‘’No nos costó adaptarnos, ya que tuvimos vecinos muy amables: una familia bonaerense y otra jujeña’’
Asimismo, Pablo nos cuenta cómo logró progresar a nivel laboral, ejerciendo su profesión como Contador Público Nacional y emprendiendo en el área de hospedaje. ‘‘Tuve la oportunidad de trabajar en varias empresas y conocí lugares increíbles. Además, con el alojamiento turístico, pudimos mostrarles a todos la provincia desde nuestros ojos. Mis lugares favoritos son Purmamarca, Salinas Grandes y Tilcara; recomiendo a todos que vayan’’ cuenta.
Otra de las cosas que disfruta es pasar tiempo de calidad con su familia y amigos, ya que la inseguridad es una variable que ya no le preocupa como antes. ‘‘Acá soy muy feliz y paseo tranquilo por los lugares que hay. Viajar nos permite valorar nuestra provincia; cada vez que me voy extraño respirar el aire jujeño. Recomiendo que conozcan Jujuy, que crece cada vez más y apuesta fuertemente al turismo’’ concluyó Pablo.